Nueva operación contra el tráfico de hachís en el Guadalquivir
La intervención contó con el apoyo de un helicóptero de la Policía Nacional que ayudó a divisar toda la zona para poder localizar al objetivo
Agentes de la Policía Nacional han detenido a cuatro personas que conformaban un red que introducía hachís utilizando embarcaciones semirrígidas por vía marítima y fluvial a través de la desembocadura del Guadalquivir.
Las detenciones se realizaron cuando los implicados intentaron ocultarse y huir cuando fueron sorprendidos en una lancha finalizando con la incautación de dos lanchas semirrígidas de las que se utilizan normalmente para alijar droga.
La operación se desarrolló el pasado 18 de octubre dentro del Plan Meridional, el plan puesto en marcha desde el Ministerio del Interior para luchar contra el narcotráfico en el Campo de Gibraltar, Costa Noroeste de Cádiz y zonas limítrofes.
Los agentes de la Policía Nacional tuvieron constancia que la madrugada anterior varias embarcaciones habían participado en diferentes alijos por la desembocadura del río y que la droga y las lanchas podrían esconderse por allí.
De esta manera pusieron en marcha un operativo y contaron con el apoyo del indicativo Cóndor, el helicóptero de la Policía Nacional que les ayudó a divisar toda la zona para poder localizar al objetivo. Mientras que algunos agentes permanecían haciendo un rastreo por tierra, desde el aire el helicóptero pudo localizar lo que parecía ser una semirrígida.
Cuando se acercó, tanto el piloto como el resto de funcionarios que iban en la nave, vieron como cuatro personas intentaban esconderse entre los juncos. Al aproximarse algo más los sospechosos se tiraron al agua para intentar escapar, teniendo un agente que disparar al aire para que depusieran en su actitud. Finalmente, todos fueron detenidos.
Tras una primera inspección ocular de la embarcación y del contenido de la misma, observaron que se trataba de una lancha neumática semirrígida, de unos diez metros de eslora aproximadamente, ataviada con tres motores.
En su interior no había droga pero sí varias garrafas de combustible, monos de piloto, varias prendas de abrigo, una tienda de campaña, varios teléfonos móviles, cuatro GPS, un teléfono satélite, así como comida envasada metida en recipientes herméticos para evitar su contacto con el agua.
Además, los agentes pudieron localizar en las inmediaciones otra embarcación de las mismas características con dos motores y unos siete metros de eslora. Un equipo del servicio de Vigilancia Aduanera (DAVA) ayudó a trasladar los dos barcos y se han hecho cargo de su custodia.
Los cuatro detenidos fueron puestos a disposición judicial en Sanlúcar la Mayor (Sevilla) debido a que la intervención se produjo en dicha demarcación, como presuntos autores de un delito de pertenencia a grupo criminal y otro delito de contrabando por el empleo de este tipo de embarcaciones, cuyo uso está prohibido tras la entrada en vigor del Real Decreto-ley 16/2018.
