viernes. 29.03.2024

La guerra abierta entre el obispo de Cádiz, Rafael Zornoza, y el sacerdote Rafael Vez ha vivido un nuevo y desagradable capítulo. A su marcha forzosa como párroco de Conil y su destierro al Clínico de Puerto Real, se une ahora el castigo de Zornoza que le impide ejercer el ministerio sagrado.

Ha sido el propio sacerdote el que ha anunciado a través de sus perfiles noticias la decisión de 'palacio'. Este es el escrito que no tiene desperdicio.

“En el día de ayer me fue entregado por el Vicario General, don Oscar González, en presencia del Sr. Vicario de Pastoral, don Fernando Campos, y el secretario canciller, que actuaba como notario, Don Cristóbal Flor, el Decreto Episcopal firmado por Don Rafael Zornoza Boy, donde se me comunica la suspensión canónica cautelar del ejercicio del Ministerio Sagrado y demás oficios eclesiásticos con la prohibición de residir en Conil de la Frontera”.

“Curiosamente el Decreto Episcopal, que trae una introducción llena de mentiras y falsedades; y que a su debido tiempo y forma en sede judicial tendrán que ser demostradas, vulnera mi derecho constitucional de residir donde me plazca”.

Imposibilidad de ejercer el ministerio sacerdotal

“A partir de este momento, y hasta que no se resuelva todo este litigio, no podré celebrar ni ejercer públicamente mi ministerio sacerdotal; ni mis oficios de profesor del Seminario y Canónigo Maestro de ceremonias, que en la actualidad de facto se me impedían ejercer”.

“Viviré mi ministerio sacerdotal durante este tiempo de otra manera rezando junto con la Iglesia y por la Iglesia, y las necesidades del mundo. ¡Sigamos adelante! La verdad prevalecerá”, concluye el comunicado de Rafael Vez Palomino.

Escrito de recusación de Rafael Vez

La defensa del sacerdote Rafael Vez, acaba de enviar al obispado un escrito de recusación “por irregularidades”, en el que recusa a Rafael Rabasco, promotor de Justicia, y al propio Tribunal eclesiástico de Cádiz, en la demanda canónica interpuesta por la diócesis contra el cura.

Rafael Rabasco se le recusa por haber actuado ya en todo este litigio por delegación del obispo, lo cual le inhabilita para poder ser promotor de Justicia de la diócesis en este caso. Y la defensa de Rafael Vez también recusa al Tribunal de la diócesis, porque ha sido nombrado por el propio obispo y, por lo tanto, se correría el riesgo de que fuese parcial. Lo lógico es que el caso se juzgue en el tribunal interdiocesano de Sevilla o en el de la Rota de Madrid.

Y es que, haciendo caso omiso a las advertencia de Roma, a través de la Congregación del Clero, que pide al obispo y al sacerdote que dialoguen y zanjen el contencioso por las buenas, monseñor Rafael Zornoza sigue aferrado a la vía judicial canónica. Más aún, eleva el pistón del desencuentro con un escrito acusatorio durísimo, firmado por su promotor de Justicia.

En la demanda de la diócesis de Cádiz, a la que ha tenido acceso RD, se acusa al cura Vez Palomino de haber actuado contra La ley Divina (contra el respeto y dignidad de las persona y por causa de escándalo y de falsos testimonios y mentiras); y contra la Ley Canónica (por crimen de falsedad, por desobediencia a la autoridad eclesiástica. Todo por impedir o condicionar la libertad y ejercicio de la potestad o ministerio; y por suscitar aversión u odio en los súbditos contra el ordinario e inducirles a la desobediencia).

El obispo de Cádiz Rafael Zornoza se 'carga' al sacerdote Rafael Vez