La junta de gobierno del Ayuntamiento de Sevilla celebra este viernes una nueva sesión, con un orden del día en el que figura, entre otros aspectos, la aprobación del gasto y los pliegos que regirán la contratación de la restauración de la Cruz de la Inquisición, ubicada en la Plaza San Francisco, en el ángulo formado entre el Arquillo y la Sala Capitular Baja de la Casa Consistorial, y objeto de un acto vandálico perpetrado en septiembre de 2019.
Tras aquel acto vandálico, agentes de la Policía Local identificaron y localizaron a una mujer extranjera como presunta autora de un delito contra el patrimonio.
El pasado mes de junio, la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico informaba favorablemente sobre el proyecto promovido por el Ayuntamiento para reparar y restaurar esta cruz datada en 1903, abarcando la actuación proyectada los daños ocasionados en septiembre de 2019, así como las patologías originadas por los agentes medioambientales y las intrínsecas a la naturaleza de sus materiales.
La Cruz de la Inquisición fue boicoteada hace justo un año
Los hechos ocurrían en la madrugada del lunes 9 de septiembre de 2019, en pleno centro de Sevilla, en el Arquillo de su Ayuntamiento. Se trata de un grave acto vandálico contra el patrimonio de la ciudad y que además se realizó a las puertas de su Consistorio.
La Cruz del Ayuntamiento en la Plaza de San Francisco, junto al Arquillo, también conocida como la de la Inquisición, ha sido en parte destrozada. Según varios testigos que fueron quienes alertaron al Servicio de Emergencias, 112, se trata de una mujer que probablemente se encontraba bajo los efectos del alcohol y como consecuencia acometió tal delito contra la reliquia en piedra.
Tras intentar buscar en las grabaciones de la cámara de seguridad se encuentran con que ésta no ha recogido imágenes debido a su no funcionamiento. El dispositivo de videovigilancia está colocado justo en la esquina de la fachada del Ayuntamiento.
Esta pieza se conoce por Cruz de la Inquisición por estar en el lugar en el que se celebró el último auto de fe. Fue colocada en este emplazamiento en el año 1903. También se le llama Cruz de las Siete Cabezas, por el número de querubines que la conforman.
