Pistolas, navajas, machetes y katanas para robar y usurpar en pleno Jerez

La banda, de la que se han detenido a 13 personas, era especialista en el cultivo indoor de cannabis sativa y el tráfico de drogas

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Jerez de la Frontera a 13 personas como presuntos autores de los delitos de contra la salud pública, tenencia ilícita de armas, usurpación de bienes inmuebles, daños, detención ilegal, robo con violencia, así como delitos contra la integridad moral y lesiones.

Los detenidos conformaban un grupo organizado especializado en la introducción de hachís en territorio nacional, así como el cultivo interior de marihuana, además habían diversificado su actividad en el robo de droga a otras organizaciones empleando para ello métodos violentos. El cabecilla de la organización junto con otros cinco detenidos han ingresado en prisión.

La investigación sobre este grupo afincado en Jerez de la Frontera se inició tras tener conocimiento de un robo con violencia que perpetraron en agosto de 2018 contra una organización rival en el que llegaron a secuestrar a uno de sus miembros para que les entregara cantidad de droga almacenada.

Fruto de las gestiones y vigilancias realizadas se descubrió que los investigados se habían establecido en varios barrios del distrito sur de Jerez de la Frontera con una amplia red de inmuebles ocupados, cuyo interior habían sido habilitados con unas completas instalaciones donde se utilizaban semillas transgénicas de “cannabis sativa” y medios artificiales para el crecimiento acelerado de los esquejes, todo ello para conseguir hasta cuatro cosechas al año.

Las instalaciones se encontraban abastecidas de fluido eléctrico mediante enganches ilegales a la red. Debido a la fuerte demanda de energía de estas instalaciones, una de las plantaciones ubicada en la barriada de Santo Tomás de Aquino provocó un incendio en el que tuvieron que intervenir el Consorcio de Bomberos, desalojando el edificio y sin provocar daños personales.

La explotación final de la investigación se realizó el miércoles 11 de septiembre, en un operativo en el que participaron más de cincuenta agentes y donde se realizaron la entrada y registró simultáneo de seis viviendas ubicadas en la barriada de la Constitución.

En los registros realizados se procedió a la detención de los investigados y en total se localizaron diez plantaciones en las que se incautaron 298 plantas de marihuana, 82 lámparas halógenas, 56 balastros magnéticos,10 ventiladores, 14 aparatos de aire acondicionado de gran tamaño, 9 filtros de carbón activo, 9 turbinas extractoras junto con 10 cuadros eléctricos ilegales.

En poder de los detenidos se halló una pistola simulada, 35 cartuchos de munición real del 9mm corto, tres cuchillos de gran tamaño, dos navajas, dos machetes y una espada tipo katana, además de útiles para el pesado y procesado de la droga tales como balanzas de precisión y prensas manuales para manipular las sustancias y convertirlas en bloques compactos, 6.845 euros en metálico que el cabecilla tenía en su domicilio, así como un vehículo de alta gama propiedad del mismo y más de 500 gramos de bellotas de hachís preparadas para su venta y distribución. También fue trasladado al refugio municipal un perro de presa de raza pitbull que los detenidos mantenían en el interior de uno de los pisos con la intención de proteger la plantación.

Una vez finalizado el atestado policial los detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia en la ciudad de Jerez de la Frontera.

La investigación ha sido dirigida por las Unidades de Delitos Especializados y Violentos de la Comisaría Provincial de Cádiz y la Comisaría Local de Jerez junto con el Grupo de Estupefacientes de Jerez.

En el operativo realizado se contó con el apoyo de las Unidades de Prevención y Reacción de la Comisaría Provincial de Cádiz y la Comisaría de Jerez y Cádiz y la Unidad de Guías Caninos con sede en Cádiz.

La operación Triángulo es de las más importantes que se han llevado a cabo en Jerez en los últimos meses. Se trata de la organización más importante y responsable de gran parte de las plantaciones en el interior de pisos, sobre todo en la zona sur de la ciudad. Además, se incide de su peligrosidad al ser un grupo armado, y que incluso ha asaltado a otros grupos de narcotraficantes, con las consecuencias violentas que ello conlleva en la mayoría de ocasiones.

Hay que reseñar el grandísimo problema social que implica estas acciones delictivas, las cuales terminan haciendo la vida imposible a los vecinos que les toca tener una plantación al lado de sus viviendas, encontrándose amenazados en gran número de ocasiones con el objeto de conseguir su silencio, aún sufriendo problemas de salud derivados de los fuertes olores, por ejemplo en mucosas y ojos. Además, la infraestructura eléctrica de estos narco-pisos elevan la probabilidad y el riesgo de incendios.