viernes. 29.03.2024

El Málaga CF de Sergio Pellicer no pudo sacar nada de su visita a Gijón. El técnico introdujo numerosos cambios, respecto al anterior partido en casa, tanto en efectivos como a nivel táctico. El equipo salió con ímpetu al impecable césped de El Molinón-Enrique Castro ‘Quini’, un campo impresionante aun sin espectadores en su colorido graderío. El silencio se rompió en el minuto 9 del primer tiempo, sonando en megafonía el famoso cántico ‘Ahora, Quini, Ahora’ en recuerdo del mito local.

El Málaga completó un notable primer cuarto de hora sometiendo a su rival, a merced del juego de los amarillos, color que ha dado suerte este curso a domicilio. La primera gran ocasión debía ser malaguista. Y así fue. Yanis, con un potente zurdazo lejano, puso a prueba a Mariño en el 20’. Poco después, Dani Barrio, de vuelta al once, se empleó con una buena parada a Manu García en el primer acercamiento sportinguista (24’).

La contienda se niveló conforme avanzaba el tiempo rumbo al descanso. Si bien en el 35’, con un córner venenoso botado por Jozabed cabeceado por Caye, casi se adelanta el MCF. No obstante, las tablas imperaron al término del primer acto.

Sin embargo, el empate se rompió al comenzar el segundo período. Djuka, el goleador local y ‘pichichi’ de la categoría, marcó a bocajarro (1-0, 48’). Dos minutos después, Mariño paró in extremis un chut de Jozabed y Matos, en el rechace, lanzó alto cerca de la escuadra. Mejías, en el 53’, cabeceó a las manos del meta rival a la salida de un córner. El Málaga no solo no notó el golpe, sino que seguía muy vivo en el envite.

Pellicer movió ficha en el 64’ con un doble cambio, dando entrada a Cristian y Jairo en lugar de Jozabed y Caye. El Sporting intentaba parar el tempo del choque, haciendo valer su exigua ventaja en el marcador.

En el 75’, el colegiado se apoyó en el VAR revisando un posible penalti a Yanis y una mano de Babin tras un remate de Cristian, pero no vio punible ninguna de las dos acciones. Cristo, por Matos, fue el siguiente cambio malaguista para refrescar el costado izquierdo a diez minutos del final. Pellicer quemó las naves en el 84’ incluyendo a Orlando Sá por Alexander González.

El Málaga lo intentó hasta el final, pero su esfuerzo no tuvo recompensa en uno de los campos más complicados de la categoría.

El Málaga no saca premio de su visita a El Molinón