Darwin Núñez, jugador de la UD Almería, ha comparecido en sala de prensa para hablar del encuentro del sábado en Elche y ha destacado que “ellos se van a hacer fuertes en su casa”, y seguidamente ha añadido que “nosotros vamos a por el objetivo de ganar, y trataremos de trabajar y llegar bien al día del partido”.

El delantero reconoce que los rojiblancos tienen que seguir corrigiendo algunos “pequeños errores, que son detalles” para poder mejorar en la competición. “Contra el Zaragoza creo que el primer tiempo lo hicimos bastante bien. En el segundo nos faltó algo más de actitud y el rival empezó a tener más balón”, ha continuado.

La visita del conjunto maño al Estadio de los Juegos Mediterráneos supuso el primero de José María Gutiérrez “Guti” al frente del banquillo. Al respecto Darwin decía que “tiene unas características de juego muy buenas. Desde que llegó nos hizo jugar, creo que se notó el día del partido en el primer tiempo. Es un gran entrenador”.

En una conversación entre el preparador y el atacante, el técnico, tal y como ha reconocido el propio futbolista, le ha pedido que “esté tranquilo porque al delantero le llegan pocos balones y tiene que aprovechar” las que tenga.

A nivel personal, Darwin Núñez ha encontrado “diferencias” entre el fútbol uruguayo y el español. En este sentido, ha expuesto que “aquí es más dinámico, más competitivo y yo me estoy adaptando poco a poco. Los primeros días me sentía fuera de lo normal porque ahora estoy conociendo la realidad del fútbol europeo”.

En lo referente a la LaLiga SmartBank, el delantero considera que la Segunda División es “muy competitiva”, lo que le ha llevado a exclamar: “Nosotros podemos levantar; tengo confianza bárbara en el equipo”, ya que ha admitido que todos en el vestuario quieren alcanzar la Primera División”.

Darwin Núñez se encuentra viviendo un “sueño”, no sólo por el objetivo ambicioso, sino por todo lo que rodeó su llegada a la capital almeriense. “Ya para mí es un sueño estar en Almería. Quería salir de Uruguay y estar aquí, con 20 años, me llamó la selección y me puse a llorar de felicidad”.

Por último, el charrúa ha vuelto a ensalzar la necesidad de tranquilidad: “Los fichajes que se hicieron fueron buenos. Somos jóvenes, tenemos mucho que recorrer y para mí esto acaba de empezar”.