jueves. 18.04.2024

El preso de ETA Ibon Muñoa Arizmendiarrieta, exedil de HB condenado por su complicidad en el asesinato del concejal del PP de Ermua (Vizcaya) Miguel Ángel Blanco; ha quedado este domingo en libertad tras abandonar el centro penitenciario de Córdoba, según ha informado la asociación de familiares de presos de ETA, Etxerat.

Muñoa Arizmendiarrieta fue condenado en 2003 por la Audiencia Nacional a 33 años de prisión como cómplice del secuestro y asesinato de Blanco. La sentencia consideró probado que Muñoa alojó en su casa y ofreció su vehículo a los autores materiales del crimen; Irantzu Gallastegui, Francisco Javier García Gaztelu y José Luis Geresta.

Finalmente, Muñoa Arizmendiarrieta ha abandonado en la mañana de este domingo el centro penitenciario de Córdoba, donde ha cumplido 20 años en prisión. A su salida de prisión ha sido recibido por familiares y amigos, que mostraban ikurriñas y carteles reclamando el regreso de los presos "a casa".

El etarra Iñaki de Lemona se libra de 74 años de prisión

El miembro de ETA Ignacio Bilbao Beascoechea, alias Iñaki de Lemona, se ha librado de entrar en prisión, a pesar de que la Audiencia Nacional le acabe de condenar a una pena de 74 años de cárcel.

Iñaki de Lemona, miembro de ETA, condenado a 74 años de cárcel, no entrará en la cácer

La pena ha sido impuesta por el atentado de 1983 en Villafranca de Ordicia (Guipúzcua), donde asesinaron a un Guardia Civil e hirieron a otros dos de gravedad.

Esto se debe a que se fija el límite de cumplimiento de las anteriores penas en 30 años. Así, se acumula esta nueva condena a las penas ya acumuladas en el auto de 14 de diciembre de 2014 dictado por la Sección Segunda de la Audiencia Nacional; cuya condena ya ha sido extinguida por el acusado.

En la sentencia conocida este jueves, los magistrados de la Sección Primera de la Sala de lo Penal imponen no obstante una pena a Bilbao de 30 años de cárcel por un delito de atentado contra miembros de la seguridad del Estado en acción terrorista; con la agravante de premeditación, y otras dos penas de 22 años por sendos delitos de asesinato frustrado.

ETA perpetuó el atentado el 2 de febrero de 1983

Los hechos probados relatan que el acusado durante 1983 formaba parte de uno de los ‘taldes’ del comando Goierri Costa de la banda terrorista ETA. La zona de actuación del comando se centraba en la provincia de Guipúzcoa y algunas zonas de Álava y Navarra.

El día 2 de febrero de 1983, Bilbao y los otros integrantes del mencionado comando, habiendo recibido la información recabada por José Miguel Latasa Guetaria –condenado por estos hechos– sobre los movimientos de vehículos del cuartel de la Guardia Civil de Villafranca de Ordicia y los puntos desde donde sería factible realizar un ataque con lanzagranadas, se reunieron en Zaldivia, aproximadamente a 4 kilómetros de Villafranca de Ordicia.

Provistos de fusiles ametralladores tipo Cetme o G-3 y dos lanzagranadas se dirigieron repartidos en dos vehículos a las proximidades del punto elegido para atacar los coches patrulla que salieran del cuartel. Una vez allí, continúa la resolución, estacionaron sus vehículos. Seguidamente se emboscaron manteniendo la visibilidad sobre el cruce existente en el Km. 422’5 de la carretera N-1 de Madrid a Francia por Irún

Un miembro de ETA sale de la cárcel tras cumplir solo la mitad de la condena