Una perra se queda ciega por el estrés durante unos fuegos artificiales

Este caso ha vuelto a abrir el debate sobre cómo afecta la pirotecnia en los animales

Suzy es una perra escocesa cruce de un labrador que se quedó ciega tras el estrés causado por unos fuegos artificiales, según ha explicado su dueña a el diario Metro.

Margaret Adams, es la dueña de la perra, al cual lleva cuatro años ciega pero ha sido ahora el momento en el que la mujer ha decidido hacer esto público, sumándose a una campaña en la red para pedir que se revisen las normas sobre el uso de fuegos artificiales.

Cuando comenzó el espectáculo pirotécnico Suzy empezó a "subirse por las paredes" y a "esconderse en rincones oscuros", comenta su dueña la cuál explico que "sus ojos estaban diferentes, así que la llevé al veterinario (...). Tiene glaucoma en ambos ojos, no puede ver nada", ha contado a ese medio británico.

"No puedo calmarla. Tengo una camiseta antiansiedad para ella y suplementos del veterinario para tratar de mantenerla tranquila", ha asegurado Adams, la cual cuenta las numerosas secuelas a las que se enfrenta su perra desde aquel trágico episodio.

"No quiero privar a otras personas de lo que les gusta hacer, pero desearía que lo hicieran dentro de un espacio de tiempo para que podamos estar preparados y los perros no se asusten. O cualquier persona, no solo los animales", ha añadido la dueña de Suzy.

La perrita fue un regalo de su hija tras la muerte de su marido. "Me dio apoyo en momentos terribles, era mi compañera. Todavía lo es, pero un modo diferente. Ahora la estoy cuidando yo más que ella a mí", agregaba Margaret.

Este caso no es el único de animales con problema por los fuegos artificiales. Molly, un cachorro de terrier de solo 18 semanas de vida, falleció esta semana tras sufrir un ataque al corazón por culpa de unos fuegos artificiales en South Yorkshire, según ha denunciado su dueña, Susan Paterson, en un post publicado en Facebook.