En el fútbol, como en la vida, cuentan más las veces que te levantas que las que te caes. El delantero del Almería, Juan Muñoz, lo reconoce en una entrevista emitida en la emisora oficial del Club:"Tuve la mala suerte -o la buena- de haber vivido momentos muy difíciles en el fútbol y cuando has estado en el barro, disfrutas el doble los momentos dulces como estos".

El utrerano viene de anotar por cuarta semana consecutiva en la Liga Smart Bank y de dar dos asistencias de gol en Lugo: "El rol que estoy cogiendo en estos partidos es más de enganche, de mediapunta, de venir a recibir y de jugar la pelota y estoy encantado. El míster me ha dado toda la confianza para ello y estoy intentando precisamente cumplir ese objetivo de jugar el balón, quedármelo y circularlo. Estoy muy feliz. Nunca había tenido este rol en tantos partidos consecutivos. Soy un jugador que me gusta jugar y es una posición bonita en la que pasa el fútbol por tus pies y trato de darle al equipo todo lo que pueda aportar sin olvidar el trabajo defensivo. Estoy satisfecho", explica.

Incluso mandó en el Anxo Carro un balón al palo tras un lanzamiento de falta directa, como ocurrió en Tenerife: "A la tercera ojalá y sea la vencida", sonríe.

Juan Muñoz está formando una dupla con Darwin Núñez que está beneficiando a ambos y, por ende, al equipo: "Es un juagdor con el que es muy fácil jugar. Es un futbolista muy rápido que siempre va a la espalda de los centrales y es fácil entenderse con él. Por sus características busca muchos desmarques y me alegra que esa apuesta que ha hecho el Club por él esté saliendo así de bien. Me alegro por el Club y por supuesto por Darwin", reconoce en UDA Radio uno de los delanteros del equipo más ofensivo de Segunda División: "Bajo mi punto de vista es más importante y es mejor que haya repartición de goles a que sea un solo delantero el que lleve todo el peso del gol. Que haya extremos, centrocampistas y defensas goleadores está haciendo al Almería más grande".

En Lugo se consiguió una victoria importantes: "Fueron tres puntos como en todos los partidos pero anímicamente y en cuanto a confianza han sido muy importantes. Nos fuimos perdiendo en navidades y afrontamos un partido difícil en Lugo con un cambio de entrenador y sin saber cómo iban a jugar. Y salió redondo. Es una satisfación muy grande, y no solo por los cuatro goles sino por las sensaciones que dimos y por lo bien que lo hicimos defensivamente. Ganar 0-4 fuera de casa implica muchas cosas".

Una victoria que sirvió para recortar distancias respecto al líder e incrementar distancia con algunos rivales directos. Y a la hora de describir la presión que hay alrededor del equipo pone un ejemplo gráfico: "Sabemos que hemos dejado el listón muy alto desde el inicio. Mi padre me decía una frase muy cierta: cuando a una persona le das jamón luego no quiere mortadela. La gente quiere que ganemos siempre y esta categoría es como es y cualquier equipo te puede bailar. Vamos en buena dinámica y hemos empezado el 2020 de forma increíble y espero que sigamos así en esta segunda vuelta".

Ahora bien, el próximo partido todavía está lejos en el tiempo puesto que no será hasta el jueves de la semana que viene: "El parón nos puede venir bien si mantenemos los pies sobre la tierra y seguimos trabajando como lo hemos hecho hasta ahora. El equpo está mentalizado y siguiendo esta línea no habrá próblemas. Estamos ilusionados por volver a jugar con nuestra gente y en nuestro estadio".