viernes. 19.04.2024

Caminito hacia la gloria eterna

La hermandad de negro pone el contrapunto austero a la jornada de los grandes misterios

El Miércoles Santo se impregna de un especial aire de duelo cuando se abren las puertas de la pequeña capilla del Caminito para una salida revestida de una singular belleza y encanto por las dimensiones de la propia capilla, ya que el paso se tiene que componer en la calle.

En ese momento cuando la tarde del Miércoles Santo llega a su epílogo, todo Cádiz se convierte en dolor para acompañar a la Señora de las Angustias en su tristeza por el entrañable marco del jardín de la Alameda.

Una tristeza que se vuelve irremediablemente canto cuan el paso arrima hasta la Casa Madre Franciscana del Rebaño de María. Las monjas, rompiendo su clausura, se asoman a la noche gaditana para ofrecer su voz al dolor de la Virgen.

La hermandad de las Angustias en su desfile procesional compone una irrepetible estampa de hondismo y rigor penitencial donde el color negro es el principal protagonista. Su recorrido solo es acompañado por el compás repetido de las horquillas.

El rostro de la Virgen, dulcemente inclinado, es un fiel reflejo de su dolor porque Cristo está muerto. Sus manos son un manantial de ternura que retienen a su Hijo, fruto soberano y que ahora solo es sangre, desposeído de su corona.

En la recogida el silencio se apodera de La Alameda, testigo mudo del final del duelo que se escenifica en las calles gaditanas en la tarde del Miércoles Santo. La gloria eterna cada vez está cerca, al menos parte del Camino ya está hecho.

Historia

La Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias, conocida por el Caminito, se funda en septiembre de 1748 como Rosario; posteriormente decae hasta desaparecer. Ya en 1934 un grupo de devotos, en su mayoría jóvenes, la reorganizan como Cofradía, siendo aprobados nuevos estatutos el 22 de enero de 1935. En el año 2011 la corporación incluye en su título a San Nicolás de Bari como cotitular. En 2012 la autoridad eclesiástica reconoce la antigüedad de la penitencial a efectos históricos y protocolarios como de 1748.

Imágenes

El grupo escultórico de Jesucristo en los brazos de su Madre de las Angustias tras ser desclavado de la Cruz, se realiza en 1748. Los últimos estudios atribuyen la imagen a Diego Roldán y Serrallonga.

Ha sido restaurado por Vasallo Parodi, José Miguel Sánchez Peña y más recientemente, por Pilar Morillo y Álvaro Domínguez.

Caminito hacia la gloria eterna