¿Qué ocurre en caso de desacuerdo entre los padres en temas importantes de sus hijos?

La Audiencia Provincial de Pontevedra en un Auto ha dado la razón al padre para que los menores se vacunen

La patria potestad, figura de la que ya hablamos en su día, se ve puesta en tela de juicio cuando el padre y la madre, con respecto a una decisión fundamental para sus hijos, tienen opiniones distintas. Desde aspectos como si los menores hacen o no la comunión, hasta cuestiones sanitarias como es la vacunación.

Así, la Audiencia Provincial de Pontevedra, el pasado 22 de julio de 2019, dictaba un Auto confirmando el Auto del Juzgado de Primera Instancia número 5 de Vigo, con fecha de 20 de noviembre de 2018, en el que resolvía sobre una demanda de un padre, que quería vacunar a sus hijos, contra el deseo de su madre, antivacunas. Esta demanda se interpone gracias al artículo 156 del Código Civil, que faculta a los padres a acudir al Juez en caso de desacuerdo.

El Juez y la Audiencia entendieron que el padre debía poder vacunar a sus hijos acudiendo a la figura del interés superior del menor, que tiene tres dimensiones: un derecho sustantivo del niño, a que su interés sea considerado primordial, por encima de los intereses de las partes; un principio jurídico, para cuando sea necesario interpretar normas, y por último una norma de procedimiento, para que cuando se tome una decisión sobre un menor, tenga que ponderarse las consecuencias positivas y negativas de cada decisión.

Estas dimensiones, citando la Audiencia a la Observación General nº14 (2013) del Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas, son tenidas en cuenta por el Juzgador para dictar su decisión. Ello teniendo en cuenta que no se pone en cuestión que los padres puedan o no defender sus creencias o cómo educar a sus hijos, ya que no hay obligación de vacunar.

Al ponderar, los Jueces entienden que debe valorarse qué puede resultar más beneficioso para los menores. Mientras que a favor de las vacunas muestra distintos materiales, el Auto no da por acreditado perjuicio alguno de las vacunas. Finalmente, acaban optando por otorgar la facultad al padre de vacunar a sus hijos según el Programa y calendario de vacunación de Galicia.