viernes. 26.04.2024

Laidy Di, el recuerdo de la princesa sigue más presente que nunca

Diana de Gales dejó un legado eterno

Lady Di no solamente fue una avanzada en su tiempo, demostró que le daba igual la opinión pública que hubiese sobre ella, hacía y deshacía a su antojo y no permitía que nadie le dijese lo que tenía o no tenía que hacer. Así fue la Princesa de Gales y es por eso que hoy en día, en una sociedad en la que de alguna manera seguimos patrones impuestos y tememos al qué dirán, su nombre sigue sonando con más fuerza que nunca.

Todos la admiraban, la querían y todos sufrieron cuando su nombre dejó de ser una realidad para convertirse en uno de los legados más importantes de la historia.

Aguantó lo que muchos no hubieran aguantando. El que fuera su marido, el Príncipe Carlos, tuvo sus idas y venidas en su matrimonio y bajo la mirada crítica de muchos no cuidó esa relación como la debía de haber cuidado. Sus hijos, Harry y Guillermo, siempre fueron los dos ojitos derechos de su madre, por los que se desvivía y por los que luchaba por encima de todo y de todos.

Tenía una personalidad arrolladora, sobre todo en el ámbito de la moda. Vestía fuera del protocolo de la Casa Real y eso era algo que a muchos le molestaba, pero que ella disfrutaba siendo la protagonista indiscutible de muchos eventos a los que acudió. Vistiendo siempre como una princesa, sin sentirse como tal, enamoró a todos.

Quizás uno de los actos más importantes en la vida profesional de Diana de Gales fue cuando le dio la mano a un enfermo de VIH. Por aquel entonces nadie se había atrevido a tener una acercamiento más allá de lo cordial con ese tipo de pacientes, pero ella le dio la mano públicamente y se dejó fotografiar con él. Esto supuso un antes y un después, ya que se pensaba que una persona que padecía esa enfermedad no debía tener contacto físico con nadie.

Ahora, el recuerdo de Lady Di sigue más vivo que nunca. Y qué verdad es esa de que las grandes personas nunca mueren porque se quedan eternamente en el recuerdo de todos nosotros, de todas las personas que les admiramos en vida, pero que les hacemos vivos hablando de ellos.

Laidy Di, el recuerdo de la princesa sigue más presente que nunca